Salud

5 razones por las que el coronavirus es tan mortal

Un simple virus ha frenado en seco la vida tal y como la conocíamos.

Nos hemos enfrentado a amenazas virales antes, incluyendo pandemias, pero el mundo no se detiene por cada nueva infección o temporada de gripe.

Entonces, ¿qué pasa con este coronavirus? ¿Cuáles son las peculiaridades en su biología que representan una amenaza única para nuestros cuerpos y nuestras vidas?

1. Maestro del engaño

En las primeras etapas de una infección el virus es capaz de engañar al cuerpo.

El coronavirus puede estar corriendo desenfrenadamente en nuestros pulmones y vías respiratorias y, aun así, nuestro sistema inmunológico piensa que todo está bien.

«Este virus es brillante, te permite tener una auténtica fábrica viral en la nariz y tú sentirte completamente bien», dice el profesor Paul Lehner de la Universidad de Cambridge.

Las células de nuestro cuerpo empiezan a liberar sustancias químicas -llamadas interferones- una vez que son asaltadas por un virus y esto es una señal de advertencia para el resto de nuestro organismo y el sistema inmunológico.

Pero el coronavirus tiene una «asombrosa capacidad» para desactivar esta advertencia química, asegura el profesor Lehner. «Lo hace tan bien que ni siquiera sabes que estás enfermo».

Cuando miras las células infectadas en el laboratorio, no puedes decir que han sido realmente infectadas y, sin embargo, las pruebas muestran que están «gritando» de la acumulación de virus existente. Y este es solo una de los comodines que el virus puede jugar, sostiene.

2. Se comporta como un asesino a la fuga

La cantidad de virus en nuestro cuerpo comienza a alcanzar su máximo el día antes de que empecemos a enfermarnos.

Pero toma al menos una semana antes de que el Covid progrese hasta el punto de que el infectado necesite tratamiento hospitalario.

«Esta es una táctica evolutiva realmente brillante porque no te metes en la cama de inmediato, sino que sales por ahí y te diviertes», dice Lehner.

Así que el virus es como un conductor que huye de la escena del accidente: ha pasado a la siguiente víctima mucho antes de que se recupere o muera.

Hablando claramente, «no le importa» si mueres, continúa el profesor Lehner, «es un virus que te golpea y se fuga».

El contraste con el comportamiento del coronavirus original, el SARS, que se manifestó en 2002, es radical. Este último era más infeccioso días después de que el paciente se sintiera enfermo, así que fue fácil de aislar.

Comentarios para este artículo

Mostrar más

Publicaciones relacionadas

Botón volver arriba
¿Quieres recibir avisos de nuevas noticias? OK No Gracias